Hoy vengo a hablaros de la segunda entrega de esta fantástica pelícua. Como siempre, DreamWorks no deja de sorprendernos, y, aunque admiré muchísimo la primera entrega y me encantó, podría decir incluso que esta me ha gustado más.
Las aventuras del joven Hipo continúan tras cinco años en esta preciosa película. A mí, personalmente, me ha encantado. Me parecen increíbles cada una de las imágenes, los colores, las texturas y el realismo que cada vez mejora más. La trama de la película me parece fantástica, es muy original, repleta de entusiasmo, emoción y aventuras; además, es bastante imprevisible y está llena de escenas emotivas y enternecedoras que incluso te harán llorar. Es, sin lugar a dudas, una película que merece la pena ver. A pesar de ser la segunda entrega no nos cuenta la continuación de lo anterior ni tampoco una aventura nueva, si no una historia relacionada con la primera película que te ayuda a entender todo mucho mejor y que no se desvía del argumento central de la primera entrega: unir dos mundos distintos pero que se pueden complementar; el de los humanos y el de los dragones. Se puede ver también la evolución de los personajes, especialmente desde la primera película a esta. Por supuesto, también están presentes distintos valores, tanto en el trato entre los hombres y animales como entre los propios hombres, una película que te dejará muchas lecciones aprendidas. Es, sin lugar a dudas, una película para disfrutar. A ello añadiría también que la banda sonora, tanto la de esta película como la de la anterior, es simplemente encantadora, con un toque vikingo y al mismo tiempo aventurero que acompaña a la perfección cada una de las escenas.
No tengo mucho más que decir, si os gustó la primera película, no sé a qué estáis esperando para ver la segunda. Y, si no habéis visto ninguna de las dos, ¡adelante, no os arrepentiréis!
Ya sabéis, ¡comentad lo que queráis y exponed los pensamientos que deseéis!
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